Siglo II a. C. Con Cartago debilitada e impotente tras la Segunda Guerra Púnica, las legiones romanas extienden de forma implacable el poder de la ciudad del Tíber en el Mediterráneo. Como un producto más de la conquista y la expansión, los latifundios de Italia y la propia Roma sustentan su economía sobre los hombros de cientos de miles de esclavos, mercancía humana traída desde todos los puntos del mundo conocido y que no tiene más valor que el que sus amos le quieran otorgar.En este cosmos de violencia y dolor, Lubbo es arrancado de su hogar en la Celtiberia, comprado por un senador romano y enviado a una explotación agrícola en Campania, donde sobrevive durante siete años hasta que el destino hace que se vea convertido en guardaespaldas personal de su señor. Odio, sufrimiento, amor y venganza van marcando la vida del joven protagonista en esta historia en la que hechos y personajes enlazan de forma paralela con determinados momentos de la conquista de Hispania y en la que, directa o indirectamente, hacen acto de presencia personajes como Sulpicio Galba, Catón o Escipión Emiliano. Con una acción que no decae nunca, el lector se traslada de forma vívida a una Roma deslumbrante pero, al mismo tiempo, oscura, cruel y corrupta.