En este último libro de la trilogía se cierran las épicas aventuras de los hermanos Espinosa de los Monteros en el primer tercio del siglo XVI.
Las Indias occidentales les depararán un último y sorprendente encuentro, en el que se pondrá a prueba su lealtad al rey: deberán decidir entre rendir la espada al Emperador o seguir la tentación de algunos de crear un nuevo imperio en América para coronarse reyes del mismo.
Un secreto que el emperador Carlos guarda en compañía de los dos hidalgos burgaleses y un revolotear de mariposas de mil colores que en su alrededor, recordando la leyenda indígena del pájaro Quetzal, serán las claves para desvelar la intriga de esta trilogía escrita en un castellano arcaizante que mimetiza al del siglo XVI.
Esta novela pertenece a la saga: